ECONOMÍA DE FICHAS: Favorece el desarrollo de buenas conductas y disminuir las no deseadas. Puede realizarse de forma grupal en clase o individual en casa. Consiste en trazar un plan junto con el niño para entregarle cuando efectúa las conductas pactadas anticipadamente (recoger su cuarto, hacer tareas, atender en clase, etc.). Si consigue determinado número de fichas, las puede canjear por un premio (golosina, juego u otros). Es necesario aclarar al niño qué conductas que debe corregir, los premios que puede conseguir y llevar un registro de su progreso. Esta técnica se puede usar con la de "coste de la respuesta", que implica la retirada de fichas o reforzadores cuando se desarrollen conductas no deseadas.
ESTRATEGIAS Y RECURSOS PARA NIÑOS CON TRASTORNO NEGATIVISTA DESAFIANTE
TIEMPO FUERA: Se utiliza ante las rabietas o los comportamientos inadecuados persistentes. Hay que apartarle a otro lugar que no le agrade de forma pausada y tranquila, mientras se le explica que cuando corrija su actitud podrá volver al espacio físico anterior. En los más pequeños, el tiempo debe limitarse a cinco o seis minutos.
“Las actividades que más le gustan a un niño pueden utilizarse para reforzar otras que le resultan más desagradables”
PRINCIPIO DE PREMACK: esta teoría, formulada por el psicólogo David Premack. Es una modalidad de reforzamiento positivo que aumenta la frecuencia de conductas apropiadas. Es necesario conocer las actividades preferidas del niño y utilizarlas como objeto de cambio por la conducta apropiada (ver televisión si terminó los deberes, aumentar las horas de uso del ordenador si atiende en clase). El objetivo es que entienda que si hace las cosas bien se puede beneficiar, si se porta mal, puede recibir un castigo.
SACIEDAD: llevar al límite una conducta inadecuada del niño puede conducir a que una situación, en inicio agradable para él, se vuelva en incómoda y lograr que se canse de ella. Si un niño llora y patalea porque quiere ver la televisión, se le puede dejar todo el día delante de ella e impedirle hacer otras actividades. Si sólo quiere comer galletas, se le darán para desayunar, almorzar, merendar y cenar.
ESTRATEGIA PARADÓJICA: Esta técnica se utiliza como último recurso cuando ya no funcionan otras. . Si se le reprueba, por ejemplo el no atender durante las horas de clase, una opción es dejarle no hacer nada durante toda la jornada y exentarlo de cualquier actividad educativa hasta que sienta, por aburrimiento, la necesidad de seguir las actividades comunes. El objetivo es convertir una obligación en algo que le resulte agradable.
EL CASTIGO: es quizá el primer método en el que piensan los adultos ante una conducta no deseada de los niños, si se usa de forma sistemática y en contextos inadecuados, puede perder eficacia. Antes de aplicar un castigo es necesario tener en cuenta algunas pautas. El castigo debe ser inmediato a la mala conducta, ya que es el único modo de conseguir que el niño comprenda qué se le reprueba. Es necesario también medir el nivel de la pena en función de la conducta. La gravedad de ésta determinará la de la infracción. Para que sea efectivo, quien lo impone debe mostrar al niño cuál es la conducta que se espera de él. Hay que cuidar, del mismo modo, que no se asocie a una conducta deseada (recoger el cuarto, hacer tareas), para que el niño no la identifique como algo desagradable.
